sábado, 7 de noviembre de 2009

Mary, Peter and Paul

El pasado 16 de Septiembre decíamos tristemente adiós a Mary Travers.
Yo conocí a Mary a través de este LP de una de mis hermanas:


Y desde entonces, he seguido escuchando las canciones que ella, Peter y Paul conjuntaban a la perfección con sus voces. Algunas de sus melodías eran originales. Otras, adaptaciones de cantantes ya consagrados. En cualquiera de los dos casos, música y voces de calidad.


Mary Ellin Travers nació en Louisville, Kentucky, el 7 de Noviembre de 1936. A principios de los años 60, en el Greenwich Village de Nueva York, se dio a conocer como integrante de un grupo de música folk, “Peter, Paul and Mary”, junto a Peter Yarrow y Noel Paul Stookey.


En 1962 salió el primer disco del grupo, que incluía temas hoy clásicos como “Lemon tree” o “If I had a hammer”. Y en su tercer álbum, “In the wind”, interpretaron canciones de Bob Dylan, entre otras la icónica “Blowin’ in the wind”. Pronto lograron conquistar al público americano y convertirse en las estrellas más populares del momento. En 1963, tres de sus discos estuvieron en las listas de mejor vendidos.


A lo largo de su carrera, “Peter, Paul and Mary” aportaron infinidad de canciones originales de gran éxito, como "Day Is done", "Apologize", "She dreams" o la entrañable "Puff, the magic dragon". Y también destacaron por arreglos especiales de otros temas de la música folk norteamericana, tanto tradicionales como de cantantes de esa misma década de los sesenta, como el citado Bob Dylan, Peter Seeger o Joan Baez.



Tres Premios Grammy avalan su labor profesional: a la mejor grabación de folk, a la mejor interpretación por un grupo y al mejor disco infantil (“Peter, Paul and Mommy”).


Aunque siguieron reuniéndose posteriormente en eventos o conmemoraciones extraordinarias, el grupo decidió disolverse en 1971 y seguir sus carreras en solitario.


Pero a mí me gusta recordarlos así:



Juntos, como grupo, pues fue así como los conocí. Por supuesto, ahora tengo este CD. Y los sigo escuchando. Y me siguen gustando. Y es que el trabajo bien hecho, bien hecho permanece.


Gracias Mary, Peter and Paul.

4 comentarios:

M. de Tejón dijo...

Pués yo, que soy bastante mayorcito ya, he de decir que este grupo en España se le empezó a reconocer sobre los años 70.
Lo hacian bién, pero no tuvieron mucha repercusión y de la misma manera que se empezó a hablar, se dejó de saber de ellos.Pero estaban ahí y la gente los conocia. Eran una especie de Everly Brothers que triunfaron en los 50 y 60, pero estos en medio de la revolución musical,más agresiva de los 70, pasaron bastante desapercibidos.
De todas formas una gran pérdida.

folletina dijo...

A mí me pasa como a tí: el disco "en el viento" estaba en casa y era uno de los más escuchados. Ver la portada del disco me resulta tan familiar como ver la foto de la comunión de mi hermano.
Me ha gustado este repaso-homenaje. Pero sigo teniendo la gran duda ¿cómo te enteras de estas cosas?????

Noelio dijo...

Pues de esto, Folletina... ¿de culebrón?, me enteré por tu hermano el de la foto de comunión, gran amigo mío y de Peter, Paul and Mary.
Y quise homenajearles porque aunque es verdad, M. de Tejón, que no se oyeron tanto como otros de su época, no necesariamente mejores, sí es cierto que lo hacían muy bien.
Y eso es todo, amigos.

Jose, the Magic Dragon dijo...

Para mí escuchar a Peter dividir al público en dos grupos para cantar "Rock my soul" se convirtió en una de las rutinas musicales más agradables de mi infancia, posteriormente de mi adolescencia y hoy de mi decrépita senectud. Una rutina tan alta que no podía pasar por encima de ella, tan baja que no podía pasar por debajo de ella y tan ancha que no podía rodearla (ingenioso guiño para el que conozca la canción).
Pero lo que yo quería contar hoy es que un día yo fui el cuarto miembro de Peter, Paul & Mary. Estaba viendo un concierto de rock con mi novia, su hermana y su chico. El público se portó fatal: unas tías que estaban de despedida de soltera con penes en la cabeza les pidieron canciones de Bisbal que se negaron a tocar, la gente hablaba mientras ellos tocaban, nadie les atendía demasiado... Y nosotros cuatro, entregados, cantábamos su repertorio, nos colocamos en primera fila y bailamos muy yeyé. En un momento dado, el cantante nos señaló y nos lo agradeció así: "mil gracias por los coros a Peter, Paul, Mary..." y entonces me miró a mí porque obviamente le sobraba y añadió: "...y John". Así que ese día yo fui el cuarto miembro de este trío.
Cómo he sentido la muerte de Mary Travers. Por suerte, su voz siempre seguirá soplando en el viento.