En 1862, durante un reconfortante viaje en barca por el río Támesis, Charles Lutwidge Dodgson entretenía con sus historias a Lorina, Alice y Edith Liddell, tres hermanas de trece, diez y ocho años, respectivamente.
Edith, Lorina y Alice Liddell
El escritor relató a las tres pequeñas las fantásticas aventuras de una niña, no casualmente llamada Alice, tras caer en una madriguera. Y Alice Liddell, la mediana de las hermanas, le pidió a Dodgson que escribiera esa historia para ella.
Dos años más tarde, Dodgson le entregaba a la niña, como regalo de Navidad, “Las aventuras de Alicia bajo tierra”, un manuscrito que contenía las propias ilustraciones del escritor.
Una versión más larga de la historia, ilustrada esta vez por John Tenniel, era publicada en 1865. “Alicia en el País de las Maravillas” aparecía ya firmada por Lewis Carroll, seudónimo con el que sería mundialmente conocido Charles Dodgson, quien también publicaría años más tarde “Alicia a través del espejo”.
Nacida en Westminster el 4 de Mayo de 1852, Alice Pleasance Liddell era la cuarta hija de Hanna Lorina y Henry Liddell, decano de Christ Church, el college de Oxford donde Dodgson era un profesor de matemáticas conocido por su pasión por la fotografía.
Gran parte de la infancia de Alice transcurrió en compañía de sus dos hermanas y de Charles Lutwidge Dodgson quien, tras conocer a la familia cuando la niña contaba apenas cuatro años, se convirtió en un visitante asiduo de los Liddell.
Aunque Alice Liddell no fue la inspiración de las ilustraciones de los maravillosos libros de Carroll (presumiblemente fue Edith, su hermana pequeña, la que sirvió realmente como modelo), no cabe la menor duda de que las mágicas aventuras del libro sí estaban dedicadas por entero a ella.
Según cuenta en su autobiografía la propia Alice, en 1932, a la edad de 80 años, viajó a Estados Unidos para la celebración del centenario del nacimiento de Lewis Carroll.
Allí se encontró brevemente con Peter Llewelyn Davies, que contaba entonces 35 años de edad. Peter era uno de los hermanos que inspiraron “Peter Pan” a J.M. Barrie.
Alice Liddell dejó nuestro mundo real dos años después, el 15 de Noviembre de 1934. Sin duda alguna para trasladarse a ese maravilloso País que seguirá haciendo las delicias de todos los que se aventuran a entrar en él.
Pondré el broche final a esta entrada dedicándosela a mi hermana Alicia. Por compartir tan ilustre nombre con la protagonista de esta historia.
Y por tener su propio País de las Maravillas. ¡Feliz No Cumpleaños!
2 comentarios:
Vaya, qué sorpresa! Pues muchas gracias por la dedicatoria, querida hermana.
En esta ocasión sí que estaba al tanto del prota de tu post y de su historia, que una es muy fan del libro este.
Gracias de nuevo y feliz no cumpleaños para tí también.
Yo también soy muy fan de este libro, que recomiendo mucho desde aquí.
Y de la maravillosa adaptación que hizo Disney, que también recomiendo. Yo misma me la volví a ver ayer. Y disfruté otra vez como una enana, como cuando era idem.
¡Cambiar, cambiar, cambiar... de lugar!
Publicar un comentario